¿De quién crees que es el problema?
Mario lleva una vida muy sencilla, comparte piso con otros chicos. Su trabajo, su gimnasio y las visitas a su madre son su día a día, aunque no viva con ella.
Este es su estilo. Su forma de vida.
Lleva con Bea 5 meses, y ella es otra cosa.
Le gusta salir, tiene muchos amigos y es mucho más activa que Mario. Ha tenido bastantes parejas y dice que ahora busca un hombre que le de tranquilidad.
Mario trabaja de lunes a viernes como administrativo, en cambio Bea trabaja los fines de semana en un bar de copas.
Vidas muy distintas, ritmos muy distintos.
Y muchas más cosas iguales que no se ven a simple vista.
Al principio Bea estaba muy bien con Mario, porque le gustaba el contraste y no se preocupó de mucho más. A fin de cuentas, Mario no le daba problemas.
Sin embargo, en los últimos 2 meses está muy quemada. No consigue que Mario mueva sus planes un ápice, y cuando lo ha intentado ha comprobado que su prioridad no es estar con ella, y punto.
No para de quejarse de lo aburrido que es Mario y en cuanto tiene confianza te pregunta si ves normal lo de su novio.
“Lo malo es que estoy enamorada”, dice. “Y ni siquiera sé por qué”.
“¿Alguien me puede decir qué puedo hacer para que mi novio espabile?”
Cuánta más razón le dan sus amigas, más se crece Bea.
“Eres un coñazo”, “no tienes sangre en las venas”, “un egoísta”, “tú no me quieres”, le repite…
Ante las acusaciones de Bea, Mario no para de justificarse diciendo que es tímido, que es muy perezoso, que lo mismo tiene alguna fobia social, etc..
Los reproches de Bea cada vez son más hirientes. Sus conversaciones terminan en dolorosos ataques, con frustración para Bea y sentimientos de culpa para Mario.
¿Piensas como las amigas de Bea o eres de los que defiende a Mario?
Las amigas de Bea piensan que Mario no la merece, es un muermo, un egoísta y no la quiere.
Los que defienden a Mario ven en Bea una arpía que se venga de él humillándole con sus calificativos, y no comprenden que, si está tan mal con él, no le deje de una vez.
¿De quién es el problema?
Comprendo la tentación de posicionarte en un lado u otro, pero por ahí no vamos bien.
- Mario puede que continúe con Bea por comodidad y por miedo a quedarse solo, y por este motivo aguanta sus insultos. En venganza inconsciente o no, cada vez pasa más de ella.
- Bea puede que prefiera estar quejándose, recibiendo la aprobación de quien la escucha, antes de asumir que Mario y ella no son compatibles y poco más se puede hacer.
- Que Bea se haya hecho esperanzas con Mario, es cosa de Bea. Si Mario era así desde el principio, poco debería haber esperado y son sus expectativas no cumplidas (las de Bea) la causa de su rabia. Sus intentos de “mejorar” a Mario lo demuestran.
- Que Mario prefiera sentirse cuestionado todo el tiempo y cada vez más victimista, tiene que ver más con su dependencia y su incapacidad para construir una relación de pareja que le ilusione, que con los insultos de Bea y sus intentos de cambiarle.
Cada uno tiene su propia responsabilidad por continuar juntos, en vez de reconocer que no son compatibles.
Por cierto, decir que “te quiero y por eso no te puedo dejar”, no es más que una tapadera en forma de excusa para no renunciar a mi propósito de tener pareja, como si eso sólo dependiera de mí.
Demuestra lo poco que me importa tu opinión o tu deseo.
Lo que pasa es que dos personas una enfrente de la otra diciéndose “te quiero y por eso no puedo dejarte” cuando en realidad se están diciendo “no me da la gana dejarte porque no entraba en mis planes”, pues te reconozco que es una dependencia complicada de detectar.
Pero no por eso tenemos que llamarle amor a esta codependencia.
¿De quién es el problema?
Ya lo has visto,
Te lo decía al principio…
Vidas muy distintas, ritmos muy distintos. Formas de ser muy diferentes.
Pero con algo en común: su incapacidad de hablar de lo que les sucede sin buscar culpables o de terminar la relación.