O quizás eres tú el cansino/a…
Detrás de la insistencia suele haber inseguridades, control, egocentrismos, dependencias…
- ¿qué hay detrás de una conducta cansina?
- ¿qué puedes hacer tú si el cansino/a es tu pareja?
- ¿y si tú eres el cansino o la cansina?
Te presento 4 maneras de ser cansinos con nuestras parejas y al revés.
1.- No deja de reclamar tu atención.
No deja de preguntarte si la/le quieres. Necesita pasar todo el tiempo contigo. Necesita que lo hagáis todo juntos: amigos, etc… No te deja espacio.
Tenéis que pensar igual, tenéis que estar de acuerdo en todo. No deja de preguntarte si esa otra chica es más guapa o más interesante que ella o si ese otro chico te parace más atractivo que él.
¿No será que quizás sienta que no merece estar contigo?
Tiene una gran necesidad de ser lo más importante para ti. Y en el fondo miedo a que te alejes en cuanto se despiste. “Si no estoy pendiente, puede irse”, puede cansarse, puede perder la ilusión, puede encontrar a alguien mejor.
Proyecta en ti sus inseguridades. Mide su valía en función de tu atención.
Y lo peor, mide tu amor en función de tu reconocimiento.
Seguramente es una persona que no se ama y espera alimentar el amor hacia a ella a costa tuya. Atención: Negará que no se ama.
Observa en qué medida puedes estar alimentando su inseguridad.
Por ejemplo, si se siente inseguro/aa porque piensa que lo mismo sientes algo por tu expareja, observa si le hablas demasiado de tu ex.
En cualquier caso, si tienes que dejar de ser tú para que tu pareja no se sienta insegura, algo no va bien.
Hazle ver que su inseguridad es algo que tiene que resolver él/ella, y no tú. Contentarla sólo hará que suba su nivel de exigencia.
2.- No deja de organizarte la vida y de aconsejarte que hagas esto o lo otro porque es muy bueno o muy sano, o te vendría muy bien.
Tu pareja te ha adoptado. Hace de madre o padre tuyo y ese no es su rol.
Mira a ver si en lo que te insiste tiene consecuencias para tu pareja y si es así observa qué puedes hacer.
Por ejemplo:
Lo que es bueno para ti, puede que no lo sea para tu pareja, en cualquier caso, es ella quien tiene que decidirlo.
Por otro lado, el que desoye continuamente los consejos de su pareja, detrás de un “no hacer caso repetitivo” puede esconderse un desinteresa, incluso una pequeña venganza hacia el otro.
3.- Tu pareja no para de hablarte de lo mismo.
No para de contarte sus problemas. No deja de hablarte de su jefe, de su trabajo, de su madre, de su amigo, de su perro…
Ves que tu pareja está obsesionada con un tema o un problema y te sientes impotente porque todo lo que le dices no le sirve. Vivís en el día de la marmota.
Observa el beneficio que obtiene quejándose, y que le escuches y le des la razón.
No por ser su pareja tienes que resistir estoicamente monólogos interminables.
Hazle ver a tu pareja que quizás necesita ayuda profesional para resolver porque si invierte toda su energía su obsesión o su problema, quizás no quede tiempo para deciros nada.
“Yo quiero apoyarte pero quizás no se la persona adecuada”.
4.- Cansina porque no deja de decirte que no le dedicas tiempo y/o atención.
Puede que estéis todo el tiempo juntos pero que aún así tu pareja se queje de que todo gira en torno a tu vida, tu familia, tus amistades y nada en torno a lo suyo o lo vuestro.
Observa si marcas tanto el ritmo que no tienes en cuenta los gustos o las necesidades de tu pareja.
Invita a tu pareja a proponer cosas y tomar la iniciativa porque parece que en este sentido estáis descompensados.